La discapacidad auditiva se refiere a la falta o disminución para oír, esto debido a la perdida en algún lugar del aparato auditivo.
La perdida auditiva puede ser desde lo más superficial hasta lo más profundo.
La discapacidad auditiva aparece como invisible ya que no aparece como características físicas evidentes. Se hace notoria fundamentalmente por el uso del audífono y en las personas que han nacido sordos o han adquirido perdida auditivas a muy temprana edad.
Las personas sordas tienen a su disposición la visual, por este motivo su lengua natural es visual gestual como la lengua de señas y no la auditiva verbal, como el lenguaje oral.
La pérdida severa de la audición en las etapas tempranas de la vida tendrá efectos importantes en el desarrollo de un niño o niña y en su adquisición de su lenguaje oral.
¿QUÉ ES LA DISCAPACIDAD AUDITIVA?
Es la dificultad o imposibilidad de utilizar el sentido del oído. En términos de la capacidad auditiva, se habla de hipoacusia y de sordera.
HIPOACUSIA: Pérdida auditiva de leve (ligera) a moderada (media); no obstante, resulta funcional para la vida diaria; siendo necesario el uso de auxiliares auditivos, entre otros elementos para optimizar los restos auditivos.
Las personas que presentan hipoacusia pueden adquirir el lenguaje oral a través de la información que reciben por vía auditiva.
SORDERA: Pérdida auditiva de severa a profunda, donde la audición no es funcional para la vida diaria aun con auxiliares auditivos; la adquisición del lenguaje oral no se da de manera natural. Los alumnos y alumnas con este tipo de pérdida utilizan principalmente el canal visual para recibir la información, para aprender y para comunicarse, por lo que la Lengua de señas es la lengua natural de las personas con esta condición.
Los niños con Discapacidad auditiva tienen dificultades en la escuela incluso una pérdida de audición leve puede presentar problemas en la escuela. Es por tanto fundamental estar atento a los signos de pérdida de audición de los alumnos.
Los niños
con discapacidad auditiva tienen problemas a la hora de asistir a escuelas
convencionales a no ser que se les proporcione la ayuda y el apoyo adecuados.
Pueden llegar a tener problemas de integración y tienden a sentarse al fondo de
la clase para pasar desapercibidos.
Muchos niños no participan en clase porque no pueden oír lo que el profesor o
los demás alumnos dicen. No siempre piden a los compañeros que repitan lo que
han dicho y algunos incluso le dicen al profesor que no necesitan micrófonos
especiales a pesar de que la amplificación de sonido les facilita la escucha.
Necesidad de ser ”?normal'
Los niños
discapacitados auditivos quieren ser como sus compañeros con audición normal y
se sienten incómodos si se llama la atención sobre su problema auditivo. Todo
esto repercute en la vida social del niño. Muchos se apartan y prefieren no
participar en las actividades escolares. No atender los problemas de estos
niños suele manifestarse en cansancio y dolores de cabeza cuando llegan a casa
de la escuela.
Incluso una pérdida de audición leve no diagnosticada en niños en edad escolar
puede afectar negativamente en el proceso de aprendizaje y en consecuencia
plateará algún tipo de dificultad de aprendizaje en la escuela. Repercutirá en
las tareas escolares si el niño con pérdida de audición emplea energía
adicional para intentar oír al profesor, tomar apuntes y procesar todo lo que
oye al mismo tiempo. La pérdida de audición en niños suelen pasar desapercibida
porque se tiende a pensar que los problemas escolares se deben a falta de
concentración o atención.